Conny Méndez

Conny Méndez nació en Caracas (Venezuela) el 11 de abril de 1898 y falleció en Miami (Estados Unidos) el 26 de noviembre de 1979. Aunque se dedicó a las artes plásticas, la interpretación dramática y, con mayor éxito, a la música, su notoriedad fuera de Venezuela procede de haber fundado el movimiento de la Metafísica Cristiana.

No debe interpretarse que Conny Méndez dedicara su vida solamente al estudio de la Metafísica, sino que se convirtió en seguidora de ideas que, desde el siglo XIX, dieron en Estados Unidos origen a movimientos espiritualistas como el Nuevo Pensamiento (New Thought) y la Ciencia Cristiana (Christian Science).

Inicia su educación en este campo en 1939, al comienzo de la Segunda Guerra Mundial. Inmediatamente de su regreso a la ciudad de Nueva York, en 1946, logra ser discípula de Emmet Fox, principal personalidad en la época del "Nuevo Pensamiento", y uno de los mayores inspiradores de los Alcohólicos Anónimos. Conny realizó las primeras traducciones al español de los libros de Emmet Fox y durante algunos años más, también en Nueva York, se prepara con las enseñanzas de otro maestro de esoterismo, el Conde de Saint Germain, quien se había transformado en un protagonista popular entre los aficionados a las ciencias ocultas.


En 1945 fundó la Hermandad Saint Germain, llamada popularmente Metafísica. Posteriormente, en 1979 puso a su obra el nombre Gran Hermandad Saint Germain. En 1946 funda en Venezuela el movimiento Metafísica Cristiana, que a pesar de su nombre no debe confundirse como perteneciente a la doctrina católica, ya que sostiene, entre otras teorías que la diferencian de la iglesia católica, que Jesús era uno de los tantos Maestros Ascendidos, una de las tantas encarnaciones terrestres de un arcángel, en lugar del Único Hijo de Dios y miembro de la Santísima Trinidad. Por esta razón, la iglesia católica no considera a la Metafísica como un desprendimiento de su seno, por el contrario, en más de una ocasión la ha acusado de “secta”, acusación a la que la Metafísica jamás ha respondido. Por el contrario, ante cada acusación de este estilo recibida, los miembros de este movimiento han respondido perdonando.

Los libros de Conny Méndez alcanzaron una notable difusión popular y pueden clasificarse, como la mayoría de los libros de sus maestros, dentro del género de autoayuda.


Muchos la llaman Diosa de la Libertad. No hay dudas de que Conny Méndez siempre actuó como una Diosa de Libertad, como cuando se atrevió a ser una de las primeras mujeres-chofer de Venezuela, una de las primeras telegrafistas y una de las primeras mujeres concertistas de voz y guitarra. Fue primera en muchas cosas, hasta cuando desencarnó, fue uno de los primeros personajes públicos venezolanos en ser incinerados, y por encima de todo, fue la Primera Metafísica. Todo esto la consagra como un ser de suprema Libertad. Respecto a las encarnaciones que se le atribuyen, pudo haber sido todos esos seres y muchos otros aún, porque Conny era polifacética y ello sólo se da en seres muy evolucionados, que en vidas anteriores han sido grandes músicos, pintores, filósofos e incluso místicos.